Peligro

Niños al Volante

Hay que estar siempre encima y riñéndoles cada dos por tres porque se dedican a hacer trastadas apenas los pierdes de vista.
Aprovechan el sentirse desatados para violar las normas a pesar de ser buenos niños.
La sanción que pende como espada de damocles sobre las cabezas de los infractores hasta que son sorprendidos ha tenido que elevarse en un rango para frenar el despropósito de violar las prohibiciones de tráfico que realizan de manera continuada algunos, no pocos, conductores que al volante son capaces de incurrir en delitos muy graves, acrecentados muchas veces por la ingesta de sicotrópicos.
La responsabilidad de un adulto normal, al volante adquiere otra categoría, la del niño que se desmadra cuando siente que no lo vigilan.
Por culpa de esta conducta anormal para un adulto, el Estado tiene asumir el papel de la madre reprensora y represora para corregir la conducta, inventándose limitaciones, carnés por puntos y demás castigos para niños.
Triste psicología la del conductor, un ser que se transforma al volante.

El Audi de Teresa

Teresa no poseía nada, solo ambición.
Desde temprano le habían apasionado los deportivos y buscaba la manera de hacerse con uno de ellos.
Las armas que tenía preparadas para tal efecto, su deslumbrante físico bien cuidado y preparado para la ocasión.
Teresa se fijó en un verde hijo de papá que por motivo de su graduación recibió como regalo un Audi TT de parte de sus generosos progenitores. La chica no le quitó ojo al TT y se pegó al pardillo paseándole la delantera por sus narices para obnubilarle. Poco tiempo de seducción hizo falta para convertirle en un gónada pensante que perdía la cabeza por las curvas de ella.
Teresa, la chica sin bienes se paseaba ya por las avenidas conduciendo el flamante Audi TT.
Audi TeTa, lo llamaba.
Quizá, por las artes empleadas en conseguirlo.

Ganaderías

La Tatuada

Ella, toda ella indecorosamente decorada dejaba entrever que tenía otros, los más íntimos que serían para descubrir en ocasiones especiales.
Ella, toda ella fue a que la estigmatizaran. Nada dijo mientras la golpeaba con tintas su cuerpo desnudo un desconocido.
Acaso un leve ¡ay!
Ella, todas ellas, miles de ellas, marcadas voluntariamente porque alguien dijo que era moda. Y cuando pase de moda estarán caducas, vetustas con sus desagraciados tribales pintarrajos. Octogenarias con sus recuerdos imborrables de un acto de exaltación del individualismo y rebeldía para ser igual, idénticas a millares. La pertenencia a la ganadería de las Tatoo, las hizo sentirse maravillosas. Ahora solo falta que a otras se les ocurra atravesarse la lengua o sus partes con agujas como una ornamental señal de liberación, que las dignifique y las haga sentir distintas, todas iguales.
Ánimo beldades, todavía quedan ideas increíbles por copiar de la Edad de Piedra.

Tratados Internacionales y movimientos migratorios ilegales

Hay cosas que sorprenden por lo absurdas.

El gobierno no puede devolver a inmigrantes porque no sabe de dónde son.

El gobierno no tiene tratados de retorno con según que países.

Oiga, mire usted, el retorno es al punto anterior, al último territorio que pisó antes de entrar en el país.

Ah, que no es de allí, y a mi qué me cuenta, si desde allí pasó a mi territorio, se le pone en ese lugar otra vez.

Que ese país no lo admite, ese no es mi problema, ese país permitió usar su territorio como paso ilegal.

Que asuma las consecuencias.

El Poder en manos peligrosas

Si Roma cayó, no fue porque la invadieran los bárbaros.

Roma se pudrió antes, cuando llegaron al poder, los degenerados.

Tras ésto, las tinieblas.

Juana y los propios

SindicaListas y la sindicaLista

Juana la Listilla, sabía sacar provecho de cualquier oportunidad que se presentase.
El próximo mes habría elecciones sindicales en la empresa y ella no se lo pensó dos veces, esperó la visita de los liberados del abanico de sindicatos y se ofreció a todos como candidata y enlace.
A ella le importaba un pimiento el color del sindicato, lo importante era ser elegida para conseguir la intocabilidad dentro de la empresa.
Juana, consiguió sentarse en el comité y de paso tener trato de favor por parte de la dirección de la empresa.
La listilla no tuvo problemas, la apoyaron para evitar que saliera elegido uno del sindicato del partido rival.
Prometió a todos que se movería por sus intereses y por eso la votaron.
Claro, que se movió por sus intereses, los suyos propios.
¡Sobre las reivindicaciones laborales!, ¡ah!, de eso no se habla.

Gustos

No me gustan los Tontos.

Les das una solución y te devuelven un problema.

La Loca

La loca de mi vecina había decidido presentarse a las elecciones con un programa que no dejaba indiferente a nadie.
Proponía la brillante idea; Para aliviar el hambre en África traer a todos los habitantes africanos que deseasen emigrar, al pueblo y remitirlos inmediatamente a diferentes municipios sin dejar a ninguno para no colapsar los centros de acogida ad hoc.
La verdad es que la idea era generosa, humanitaria y rimbombante. Los costos de los traslados a cargo de los impuestos, total 4, 5 sueldos de impuestos directos al año es nada si se lo gasta otro en tu nombre.
Había algo de recelo entre los municipios de acogida por sorpresa, ya que se encontraban de sopetón con gente deambulando sin oficio ni beneficio, a pesar de que habían descubierto el mecanismo del endoso, o sea llega la policía, los suben a un autobús con el billete pagado y adiós, a otro sitio a hacer turismo de indigencia.
La loca como la llamaban, tenía recursos para todo, decía que tenía un plan B, por si la cosa se desmadraba. Decía que Europa pondría de su bolsillo los recursos necesarios para hacer una valla en el mar grande e impedir que los pateras mojadas se adentrasen en el territorio.
La loca, tenía dos planes, el uno y el contrario al mismo tiempo.

Por eso le llamaban La loca.

La Intuición de Ernesto

Eran las 07:00 A.M., Ernesto apuraba la última gota de café, mientras intercambiaba instrucciones con su programa de recomposición celular.
La máquina había detectado en su cuerpo durante la noche, un desorden en su estructura provocado por el ataque de un virus. Ernesto ya habituado al sistema Regeneratron, se lo tomaba como una rutina más. Estaba tan ligado al artilugio de manera que lo empleaba para casi todo.
El aparato había sido diseñado originariamente para transferir al cerebro bases de datos e instrucciones en pocos segundos, con lo cual si quería aprender piano en media hora, cualquier humano, con el sistema cerebral, nervioso y muscular en perfecto estado, podría ser un Rubinstein en una tarde.
Ante las limitaciones que suponía el estado corporal sano como condición necesaria, se pusieron a investigar sobre las posiblidades de incorporar un programa de regeneración y corrección celular que permitiera el uso generalizado del sistema sin condiciones previas.
El concepto de salud pasó a ser el de guardar el ADN en un banco de datos y retornar una copia al cuerpo en caso de colapso para una reconstrucción vital.
Y el concepto de aprendizaje, cursos, estudios, cambió radicalmente. Ahora bastaba enchufarse a la máquina para adquirir conocimientos en pocos minutos, las cargas venían con un programa de asimilación que hacía de puente entre el dato y el conocimiento, y de ello el resultado era óptimo, mejorando incluso lo que la naturaleza lograba en años.
Ernesto sabía que conocimiento era una cosa y sentido común otra, y además que por algún motivo misterioso el bien llevaba aparejado el mal, cuando por una intuición descubrió que el virus que lo había contagiado era producto de una campaña de Marketing de una empresa fabricante de artilugios que prometía antídotos universales.

El Miedo

No sabe cuánto le agradezco que me obligue a beber del biberón de mi bebé para demostrarle que es inocuo, es por mi seguridad y es correcto lo que me pide.

El gobierno del terror hace pueblos muy dóciles, imbéciles y distraídos, así nadie se ocupa de los ladrones del erario.

Si el terrorista tiene un perfil, entonces qué motivo hay para quitarle el líquido de las lentillas a la panadera de la esquina.

¡Será que se busca que la panadera apoye sin límites al que la defiende de los terroristas!

Resulta que miramos con espanto a los orates que gobiernan por el tercer mundo y por omisión las personas decentes tenemos en el primero a dementes ocupados en ofuscar a la población y que arropados por la industria de ladrones con pedigrí han conseguido el poder con Golpes de Estado de cuarta generación.

Los Talibanes de Occidente son los que nos gobiernan, y de eso el culpable es usted.

Aquellos Inolvidables

La Clase

Dónde estarás, Gómez, el más hábil fabricador de chuletas, nunca le hizo falta estudiar, le bastó ayudarse del engaño para salir airoso de las pruebas de memoria y de razonamiento. Y García, dónde estarás, comprando tesinas para presentarlas como tuyas. Y Elena, con el cuento y esas piernas logrando que te hicieran los deberes, dónde estarás. Y Juan, el guaperas, que conseguía los exámenes, algo tendría que ver su dedicación al trapicheo, nunca lo supe.
Dónde estarás, Ana, la que ligaba con profesores. Y Roberto, el que creía que los bolis guapos de estuches ajenos eran suyos.
Dónde estará Rodrigo, el de las apuestas, y Bernardo, el matón, que atemorizaba hasta a su abuela. Dónde, Rolando el afeminado. Y Sergio, el líder estudiantil de la clase que nos metía en huelga tras huelga. Recuerdo también, a Javier el mentiroso.
Había otros más, claro, pero éstos eran los que destacaban.

Supe que, Sergio consiguió un cartón de Licenciado en Derecho y tiene un Bufete con García que es Diputado y Lobby.
Gómez, es secretario de gobierno y asesor de empresas públicas, pertenece además a una secta ultracatólica, que coloca a sus miembros en puestos de la administración como forma de poder e influencia.

Y que Elena, es Diputada, ¡legisla!
Ana, se casó con Claudio, que es embajador y comisionista de armamento.
Que Bernardo tiene una empresa de seguridad, le hace un precio especial a Juan, el empresario de locales nocturnos.
Roberto es el jefe de la brigada antinarcóticos y Rodrigo, dueño de una cuadra. Rolando tiene un Macdonals.
Javier, presenta un telediario.
Ah, por cierto, los demás insulsos, a qué se dedican, no lo sé, seguramente a votar por esta piara.

Todo por la audiencia

Tele Water (W.C.)


Los neoconsumidores deben abundar por los estercoleros de la sociedad a tenor del producto que se utiliza como gancho para captar su audiencia para vender publicidad.
Pero si la audiencia es cantidad y no calidad, entonces estamos hablando de un tipo de público mayoritario que apoya esta clase de excremento producido a su medida para satisfacer sus necesidades de esparcimiento.
Este público ordinario, ha inundado con su mal gusto la televisión y ha destrozado la calidad del producto de consumo en general, ya que es incapaz de distinguir.
La razón, los productores sin escrúpulos han comenzado a dar gato por liebre a precio de liebre de primera, sin que se den cuenta estos barriobajeros que cuentan con la cartera llena gracias a la bonanza económica y que enganchados al consumo compulsivo encuentran en éste la admiración social como demostración de éxito que suple al de tener títulos, estudios o dote intelectual. Estos empresarios han conseguido de esta subcategoría mayoritaria una fuente de ingresos consolidada a costa de eliminar el modelo de la clase media.
Así han rebajado el nivel cultural, el nivel de educación cívica, la moral, la ética, dando paso a una sociedad de consumo disoluta, en la cual el modelo son los usos y costumbres de los rufianes, los maleducados, las rameras, verduleras , los incultos y demás baja ralea, incluidos colectivos que han irrumpido recientemente.

Defiendo la libertad y a la clase media por sus valores de esfuerzo, cultura, saber hacer, comportamiento y mucho más. Y no disimulo mi desprecio por lo que representa la chusma.

Vacaciones

Ellas prefieren a los Chulos, pero, en sociedad, a ti, tontín.

Buscaba diversión, pero quería decir, dar rienda suelta a los instintos básicos. Su plan era inconfesable, y lo mal disimulaba con un exabrupto cuando sentía que la interrogaban en su familia.
Los chulos de discoteca y profesionales de la delincuencia estaban a la espera de la llegada de nueva horneada de adolescentas casi vestidas y repintadas.
Las casadas con anillo y solteras con novio iban en la misma ruta, todas en disputa por el mejor dotado alegrador de la noche.
Los catadores, duchos en experiencias similares, ofrecían gratis a sus meriendas el líquido quitavelos que en un abrir y cerrar de garganta parecía desmelenar a la más estrecha.
La cara oculta gobernada por las hormonas, la personalidad sin frenos, despojada de la coraza de la represión cultural y familiar, experimentaba el frenesí y el éxtasis por quien tenía la clave de su conversión al mundo de los sentidos.
Los cuernos crecían a distancia al tiempo que las bragas sucumbían, abandonadas, olvidadas.

Sin testigos, acaso cómplices, todas callaron al volver.

Hay que guardar las apariencias, y a disimular otra vez.