Aquellos Inolvidables

La Clase

Dónde estarás, Gómez, el más hábil fabricador de chuletas, nunca le hizo falta estudiar, le bastó ayudarse del engaño para salir airoso de las pruebas de memoria y de razonamiento. Y García, dónde estarás, comprando tesinas para presentarlas como tuyas. Y Elena, con el cuento y esas piernas logrando que te hicieran los deberes, dónde estarás. Y Juan, el guaperas, que conseguía los exámenes, algo tendría que ver su dedicación al trapicheo, nunca lo supe.
Dónde estarás, Ana, la que ligaba con profesores. Y Roberto, el que creía que los bolis guapos de estuches ajenos eran suyos.
Dónde estará Rodrigo, el de las apuestas, y Bernardo, el matón, que atemorizaba hasta a su abuela. Dónde, Rolando el afeminado. Y Sergio, el líder estudiantil de la clase que nos metía en huelga tras huelga. Recuerdo también, a Javier el mentiroso.
Había otros más, claro, pero éstos eran los que destacaban.

Supe que, Sergio consiguió un cartón de Licenciado en Derecho y tiene un Bufete con García que es Diputado y Lobby.
Gómez, es secretario de gobierno y asesor de empresas públicas, pertenece además a una secta ultracatólica, que coloca a sus miembros en puestos de la administración como forma de poder e influencia.

Y que Elena, es Diputada, ¡legisla!
Ana, se casó con Claudio, que es embajador y comisionista de armamento.
Que Bernardo tiene una empresa de seguridad, le hace un precio especial a Juan, el empresario de locales nocturnos.
Roberto es el jefe de la brigada antinarcóticos y Rodrigo, dueño de una cuadra. Rolando tiene un Macdonals.
Javier, presenta un telediario.
Ah, por cierto, los demás insulsos, a qué se dedican, no lo sé, seguramente a votar por esta piara.