1984, 1985, 1986, 1987, ...

Las masas por definición son acéfalas, por eso se las manipula NO con la razón sino con los sentimientos.
Los discursos encendidos, pasionales, la gesticulación teatral de los líderes, lo son para llegarles al corazón o la bilis, si despiertan la ira contra el eterno enemigo exterior.
El político corazón de verano, corazón de otoño, el telediario corazón o visceras. Luego los dos minutos de odio, y los viernes el consejo de ministros que nos dará la buena nueva creada en el Ministerio del Amor y en el Ministerio de la Verdad. Así las viviendas pasan a ser soluciones habitacionales, se dice cuanto espacio deben tener, y en su lugar el gobierno regala unas zapatillas.

La felicidad la otorga el Estado y el que contradiga esta idea perpetrará un crimental.
Tal como subrayaron otros, si se altera el pasado las predicciones serán siempre ciertas. Por lo tanto se puede manipular el presente y el futuro si borramos el pasado y lo reescribimos para acomodar la historia a lo que nos convenga. Controlar el pasado para controlar el futuro. La ignorancia es la fuerza.
La (ING)eniería (SOC)ial persigue que la prole dependa de las dádivas del Estado para tenerles sumisos, les aterra para que busquen refugio en el Estado y permite la delincuencia para estén distraídos con otros problemas de impacto cercanos, además de inundarles de droga para narcotizarles.
Sumisión, ignorancia, dependencia, sedación y cortinas de humo. Lo blanco es negro, lo negro es blanco y las veces que haga falta, ya que todo discurso se acomoda a la oportunidad. Los perdedores son los ganadores, los ganadores son los ganadores, la guerra es la paz. La nueva lucha de clases es la lucha entre el tercer mundo y el primer mundo opresor y globalizador. Entre machos y hembras subyugadas. Y el Islam es liberador. La alianza de civilizaciones es la respuesta a tanta incompresión.

La neolengua como desarrollo de la actual ingeniería social del post-estructuralismo, de la deconstrucción, es una copia del ING-SOC. Han borrado la palabra "negro" entre otras, y hasta los que defienden la libertad, ya usan el término "subsahariano" para no ser acusados de racistas. Cabe mayor despropósito, caer en su juego de eliminar palabras para limitar y controlar el pensamiento.

En televisión, aprovechando que el pueblo está atento a sus series favoritas, repentinamente y a cada cierto tiempo recibe flashes de consignas, lanzadas por los protagonistas, incrustadas en el guión como si fuera un corte publicitario que pasa inadvertido a la mayoría de la población, logrando un efecto subliminal de orientación del pensamiento político y de distorsión de la realidad. Las apostillas a lo que dice tal o cual, son la carga ideológica con la respuesta del partido. Editar los comentarios y las encuestas callejeras forman parte del extraño trabajo de los miembros del partido repartidos en las empresas privadas de comunicación. La orientación a cambio de beneficios empresariales. Empresarios que juegan sucio, que no quieren la libertad porque sus negocios son comer del totalitarismo, sin competencia, con ganancias seguras.
Los que no pertenezcan al partido pero que en su trabajo desarrollen actos contrarios a los intereses del partido, serán inscritos en la lista negra lo cual significa el final de su carrera profesional o el hundimiento de su empresa.

Los miembros del partido que contradigan al líder serán vaporizados, perseguidos por la policía del pensamiento.

La libertad es un peligro para los totalitarios, sean éstos empresarios o políticos, porque amenaza su sistema y su negocio.